domingo, 16 de febrero de 2014

Inteligencia tóxica





Sin título, Mayo 2006



  La inteligencia racional es un órgano virtual que se ha desarrollado en los seres humanos para resolver problemas específicos de adaptación al entorno.

  Su actividad está asociada con la ondas cerebrales de tipo Gamma (<30 mV) y de tipo Beta (13<>30 mV). Estas ondas son mucho más energéticas que las ondas Alfa o Theta, relativamente más debiles y de frecuencia más larga, presentes en los períodos de descanso o menos activos.


  Una actividad cortical intensa y continuada da lugar a una considerable cantidad de neurotransmisores residuales altamente reactivos y tóxicos que deben ser metabolizados (destruidos) lo antes posible. Sin embargo, cualquier persona puede llegar a desarrollar adicciones a los neurotransmisores, al extremo de llegar a ser adicto a cualquier comportamiento llevado a cabo bajo una intensa y continuada actividad cerebral (Los adictos al trabajo o los ludópatas son sólo un par de ejemplos).